PATRIA (FERNANDO ARAMBURU)

Una de las grandes novelas del 2016. Dos familias vascas unidas por lazos de amistad; y un acto de terrorismo que destruirá no sólo su relación sino además la convivencia de ambas en el pueblo en que residen.


A estas alturas y dada la gran controversia, fama y publicidad que ha suscitado la obra de Aramburu es muy posible que la sinopsis de la novela sea por todos ya conocida. No obstante y partiendo de esa base hay que decir que en ese aspecto no le resta ni un ápice para describirla como una novela de narrativa ágil, intuitiva y de una belleza descriptiva notable. Pese a ser una historia que aprovecha los tópicos del drama, unidos al terror que incita un acto terrorista; el escritor sorprende adentrándose en terrenos más personales y completamente ajenos al eje central de la historia.

Fernando Aramburu ha escrito una novela con una estructura muy bien definida y que en ningún momento sigue un orden establecido. Consigue recrear una atmósfera narrativa alrededor de ella y no solo aprovecha el efectivo recurso del drama familiar; también opta por describir cada una de las vidas de los distintos integrantes de ambas familias logrando así un hilo argumental distinto, interesante y muy ameno.

Los 125 episodios que componen la novela son otro de los grandes atractivos de esta obra al ser breves, bien definidos y muy bien argumentados. Complementan a la perfección con el resto del conjunto de la historia al poderla continuar en cualquier punto gracias al variado argumento y a su magnífico desarrollo en cada uno de ellos.

La carga emocional y dramática están muy presentes en "Patria" y Aramburu no solo sabe aprovecharla sino que además consigue potenciar su fórmula a través de un estilo profundo y gratamente descriptivo. 

Quienes crean que "Patria" no es más que una novela que narra la historia de dos familias vascas destruidas por un ataque terrorista de ETA y que gran parte del drama y la historia solo reside en ese argumento se sorprenderá por el original diseño y el gran trabajo realizado por el escritor; ya que construye con gran maestría una estructura argumental brillante y muy bien definida.
La descripción que Fernando Aramburu transmite en cada una de las emociones narradas y la forma en que plasma esos sentimientos a través de sus personajes tienen una connotación muy significativa y definen perfectamente la esencia de la novela. Estos y otros aspectos que descubrirá el lector a lo largo de la lectura son motivos más que suficientes para iniciar su historia y valorarla como una obra:
(MUY RECOMENDABLE) ★★★★ 4,5